Augusta Ada Byron King nació en diciembre de 1815. Es la única hija legítima del poeta G. G. Byron, quien abandonó a su mujer e hija cuando esta contaba con tan solo dos meses de edad.
Es curioso que a pesar de su inteligencia y brillantes contribuciones a la ciencia, aparezca siempre mencionada primero como la única hija legítima de Lord Byron.
Ada nació, creció, vivió y murió en Inglaterra y nunca conoció personalmente a su padre, con quien se comunicaba a través de cartas, hasta que él murió cuando Ada tenía ocho años.
Pertenecía a la alta sociedad victoriana, y en aquélla época estaba de moda estar al día con los avances científicos. Estas circunstancias le permitieron acceder al estudio de las ciencias, actividad que además fue reforzada por su madre, Anna Isabella, gran aficionada ella misma a las matemáticas.
Recibió clases particulares de matemáticas y astronomía y conoció a Mary Sommerville cuando esta acababa de publicar su libro sobre mecánica celeste. Recibía castigos o recompensas en función de sus avances con los estudios y sufrió graves problemas de salud ya desde su juventud, que logró superar gracias a su extraordinaria fuerza de voluntad.
A los veinte años se casó con William King, quien fue nombrado conde y por tanto Ada pasó a ser la Condesa de Lovelace.
En su vida conoció a algunos físicos y matemáticos destacables de la época: Brewster, Wheatstone, Faraday, Babbage …
Pero seguramente fue Charles Babbage quien mayor influencia tuvo en su vida, tanto personal como científica (la vida sentimental de Ada transcurrió de forma bastante escandalosa y le causó grandes sufrimientos).
Babbage estaba trabajando en su máquina analítica, de forma teórica ya que nunca se llegó a construir, pero que incluía en su diseño los principios por los cuales funcionan los ordenadores de que tenemos hoy. Ada lo conoció en una conferencia, cuando ella tenía 17 años, y después le escribió una carta que supuso el comienzo de una larga relación científica y, según las malas lenguas, también sentimental.
Aunque nunca escribió poesía (actividad de la que tanto su padre como su madre la mantuvieron alejada), era una gran escritora de cartas, aunque muchas de ellas no se han conservado ya que su marido las destruyó.
Ada está considerada hoy en día la primera ingeniera de software de la historia. Además de ser una brillante matemática, pensó cómo habría que programar esta hipotética máquina de Babbage, y llegó incluso a escribir complejos programas (por ejemplo uno que calcularía los número de Bernouilli), además de ayudar a Babbage a resolver serios errores en su diseño.
Esta mujer publicó varios trabajos de matemáticas y sobre la máquina de Babbage, pero firmaba con sus iniciales porque era consciente de que su condición femenina desvalorizaría sus ideas.
Como así fue, de todas formas. Sus ideas fueron recogidas y desarrolladas posteriormente por A. M. Turing y J. von Neumann, pero no ha sido hasta hace unos pocos años que el trabajo y valiosa aportación de la Condesa de Lovelace a la informática ha empezado a ser reconocido como algo tan valioso o más que la de muchos de sus colegas cuyos nombres nos resultan mucho más familiares.
Su aportación a la Informática ha sido decisiva: inventó el primer lenguaje de programación conocido (una notación inventada por ella para describir los algoritmos que se ejecutarían en la máquina analítica) y el concepto de subrutina (conjunto de instrucciones que se repiten en un bucle). Por eso se le empieza a considerar como la primera programadora de la historia y también como la que inventó al ingeniería del software.
Ada murió en noviembre de 1852, a los 36 años y está enterrada en la misma tumba que Lord Byron, que también murió a esa edad. También dicen, las malas lenguas, que si no hubiera muerto tan joven la máquina analítica se habría llegadoa construir.
Actualmente se puede encontrar mucha información sobre ella en Internet y se han publicado varios libros sobre su vida y su trabajo.
Buen verano.
Clara Luz
Gracias Miquel.
Sí, repetimos y repetimos. Cambian las modas en el vestir y las apariencias de las cosas, pero los comportamientos a veces parecen no evolucionar mucho.
Me gusta mucho tu forma de ver el tiempo como algo siempre nuevo, que se presenta en fases, viviéndolo como una oportunidad para aprender, para experimentar.
Ya que sacas a colación el tema de la cuántica, es muy interesante porque nos presenta una visión que nada tiene que ver con el tiempo sino con los sucesos correlacionados. Es fascinante. Voy a ver si leo algo más sobre esto del entanglement y la decoherencia y los ordenadores cuánticos este verano y escribo algo.
Un abrazo
Que lejos queda eso de 1850. Eso significa que en 1800 se inicia la verdadera revolución tecnologica en que la máquina se crea para servir a la humanudad y ahora resulta que somos esclavos de las maquinas y del tiempo que corre sin cesar, Hacia donde?. Un tiempo sin periodo no es tiempo, así que es ciclico y no lineal. Que pasaria con nuestras vidas si consideraramos el tiempo como el resultado de unos ciclos periodicos y repetitivos, y es que al mirar hacia esa dirección lo constatariamos… La fisica cuantica no puede refutarlo y en cambio nos dariamos la oportunidad de vivir la vida como fases de acontecimientos cuya relación por simpatia (resonancia) ofrece una nueva manera de apreender de la experiencia. Los ciclos lunares es la manifestación más cercana de este movimiento entre el sol y la luna, y en un factor equivalente leer los ciclos planetarios en virtud de los arquetipos que simbolizan en nuestra cultura. Y el tiempo seria siempre nuevo porque se avanzaria sin tener que repetir y repetir por no tener conciencia de que las cosas vuelven, y a menudo, segun en que ciclo mayor estemos viviendo hay que estar atentos para no repetir la reacción, la conducta o la situación que no deseo.
Una abrazo Clara