‘Meninas Cartoneras’ estuvo en Tetuán enseñándonos cómo hacer libros con materiales reciclados. Aquí Tetuán estuvo en Studio Banana para entrevistarlas.
BeaBurgos
Meninas Cartoneras es la primera editorial cartonera de España que sigue el modelo desarrollado por más de una treintena de editoriales cartoneras latinoamericanas. Su proyecto es, según dicen, «en esencia literario, pero también artístico, ecológico, social y solidario.»
La iniciativa de las editoriales cartoneras surge en el contexto de una Argentina sumida en una grave crisis financiera que obliga a sacarle punta al ingenio. En el año 2003 nace Eloísa Cartonera, una editorial que encuaderna sus libros con tapas de cartón comprado a cartoneros (recicladores, gente que sobrevive de recoger cartones y papel en la calle para venderlo).
Con esta iniciativa, además de apoyar a un sector ciudadano que malvivía de recoger materiales, se pretendía favorecer el acceso a la literatura para todos, pues los libros se vendían bajo precio, y al mismo tiempo fomentar la conciencia ecológica, al emplear materiales reciclados.
Sus portadas pintadas a mano terminaron por convertir a los libros en auténticas obras de arte y el movimiento de editoriales cartoneras se extendió rápidamente por toda Argentina y en poco tiempo por toda Latinoamérica.
Hoy en día existen en España seis editoriales cartoneras. Meninas Cartoneras, radicadas en Madrid, visitaron Tetuán la semana pasada. Estuvieron en Studio Banana y nos hablaron de su historia y sus relaciones con otras editoriales. Además, nos enseñaron cómo crear un buen libro cartonero.
Habla Kika Valdés, una de las fundadoras de la editorial:
Silvia Ramírez nos habla sobre la creación y el arte de los libros cartoneros:
En el taller los participantes se acercaron al reciclaje del arte, la literatura en Iberoamérica y sus procesos de encuadernación mediante la realización de un ejemplar personalizado junto a los creadores del movimiento cartonero.
GALERÍA FOTOGRÁFICA: Cómo hacer libros en 10 pasos
no entienda nada…
no entiendo nada