Ofelia Nieto 29, sobre la que está pendiente una orden de desahucio y derribo, vive las últimas horas del plazo de ejecución arropada por decenas de activistas de la PAH y el 15M. La familia Gracia González lleva meses sufriendo con angustia y temor el momento del derribo de su casa.
BeaBurgos, 28.08.2013
«Esto es una causa justa. Lo que quieren es quedarse con las plusvalías de nuestro terreno. Nosotros solo queremos nuestra casa», afirma sin titubear Luisa Gracia. Desde que tres meses atrás contactaran con la asamblea del 15M de Tetuán para que apoyaran su causa, la familia Gracia González no ha tenido ni un momento de descanso.
Su vivienda, en Ofelia Nieto 29, fue expropiada por el ayuntamiento de Madrid en el año 2009 atendiendo a un nuevo plan urbanístico aprobado en el 2004 por el que toda la manzana a la que pertenecía su casa quedaba incluida dentro de lo que el ayuntamiento denominó una «Bolsa de deterioro urbanístico».
Estado que presentaba esta mañana Ofelia Nieto 29, con decenas de activistas en el interior de la vivienda y en la calle. Foto: BeaBurgos
A raíz de las expropiaciones de un total de 19 viviendas, en la margen oeste de Ofelia Nieto se abrió una nueva calle que comunicaba esta avenida principal con la calle Santo Ángel de la Guarda. La nueva vía, que comunica Ofelia nieto con un colegio y un polideportivo en Santo Ángel de la Guarda, está dotada de una amplia acera que, al llegar a la manzana de Ofelia Nieto 29 se ensancha incomprensiblemente algo más de un metro.
Así es como la acera entra en conflicto con 6 metros cuadrados de su vivienda y así es como la familia Gracia González propuso al ayuntamiento perder estos 6 metros cuadrados para la ampliación de la acera. Sin embargo, ninguno de sus recursos y propuestas ha sido escuchado y se ha seguido adelante con la expropiación y la orden de desahucio y derribo.
#OfeliaResiste: activismo en defensa de Ofelia Nieto 29
El pasado 14 de agosto la familia vivió uno de los momentos más tensos, cuando decenas de policías nacionales y municipales se presentaron en la vivienda a las 6:15 de la mañana. La presencia del Samur Social, servicio municipal en caso de emergencias que presta atención a las personas sin hogar, hacía presagiar lo peor.
Después de tres largas horas, en las que el apoyo vecinal y de activistas fue ganando en intensidad, la Policía abandonaba la calle Ofelia Nieto ante el regocijo de los presentes.
Esa alegría del momento pronto se convertiría en organización para luchar frente a un nuevo posible intento de desahucio. La orden judicial establecía un mes de plazo para efectuar el desalojo y derribo de la vivienda, de manera que la familia era consciente de que en cualquier momento la Policía podía volver a presentarse y ejecutar la orden dictada por el juzgado número 4 de la Gran Vía el pasado 26 de julio.
Desde el pasado 14 de agosto, que marcó esa primera victoria para la familia, han estado arropados en todo momento por cientos de activistas que han organizado turnos para no dejar a los Gracia González solos.
15 noches de acampada en la azotea de la vivienda, presión frente a la Junta de Moncloa-Aravaca (distrito al que pertenece la vivienda), acciones de protesta frente al Comité Olímpico Español, visitas a las oficinas de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid, han sido solo algunas de las acciones de apoyo protagonizadas por la asamblea del 15M de Tetuán, la PAH y otros colectivos afines. Incluso han llegado a presentarse en el Ayuntamiento de Madrid con Cobri, una mascota con la que pretenden denunciar la corrupción dentro del partido político que gobierna la ciudad.
Tras estos 15 días, hoy, a medianoche, vence el plazo para la ejecución del derribo. Se cierra así una etapa para la familia Gracia González, que había intentando durante 10 años, a través de recursos de toda índole, evitar la expropiación y el desalojo de su vivienda, comprada en 1957 y en la que desde entonces han vivido hasta cuatro generaciones. «Hemos hecho una permanencia continua de 24h durante 14 días. Quiero agradecer a todos y cada uno de los ciudadanos que han estado aquí para que el derribo no se produzca», afirma Luisa Gracia.
A partir de mañana se abre una nueva etapa. «Se está esperando a una resolución que hay abierta que tiene que salir el día 16 de octubre». Mientras, desconocen si el juzgado puede dictar una nueva orden de desahucio. «Aguantaremos hasta donde haya que aguantar», concluye Luisa.
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