Esta semana os dejamos una receta realmente curiosa, divertida, riquísima y original: El pollo crujiente estilo Kentucky. Una de las recetas americanas más ricas que hemos probado, desconocida por casi todos en nuestras casas, a pesar de que es fácil de hacer y suele encantar a todos. El pollo crujiente se puede hacer con cereales o kikos, nosotras hemos elegido la versión menos calórica y la hemos hecho con los cereales.
Aunque lleva tiempo por el marinado, no es nada complicada de hacer, desde aquí os animamos a que la probéis. Dejaréis alucinados a todos, asegurado.
Esta receta con acompañamiento, da perfectamente para 6 personas.
Ingredientes para el pollo crujiente:
- 1/2 kilo de pollo (Yo utilicé pechuga en tiras, también podéis hacerlo con trozos pero yo les quitaría la piel).
- Aceite para freír.
Para hacer el marinado:
- 300-350 ml de agua aprox.
- 150 gramos de harina de trigo normal
- 75 gramos de maizena
- 1 cuchara sopera de pimentón (yo use picante pero podéis utilizar dulce si queréis suavizar el sabor o no toleráis bien el picante)
- 1 y 1/2 cucharitas de postre de curry
- 1 cucharita de postre de ajo en polvo
- 1 cucharita de postre de pimienta (yo usé blanca)
- 1 cucharita de postre de perejil en especia no fresco
- 1 pizca de sal
Para hacer el empanado crujiente:
- 300 gramos aproximadamente de cereales tipo Corn Flakes (casi una caja entera, se puede utilizar cualquier marca pero siempre sin azúcar)
- 1 cucharita de postre de curry
- 1 cucharita de postre de pimienta
- 1 cucharita de postre de ajo en polvo
- 1 cucharita de postre de pimentón
Preparación del pollo crujiente:
Lo primero en cualquier receta que vayáis a prepara es organizar y preparar los ingredientes. Empezaremos troceando el pollo, haremos trozos o tiras pequeñas para que se cocine bien.
Seguimos preparando un bol grande para hacer el marinado del nuestro pollo crujiente y ponemos la harina, la maizena y las especias (yo puse el doble de casi de todas las especias porque me gusta la comida picante, si vais a hacer la receta para niños, que es muy apropiada y les encanta, podéis suavizarla o incluso quitarle las especias picantes). Mezclad un poco con una cuchara. Comenzaremos añadiendo el agua poco a poco, mezclando y hasta que veamos que espese un poco, no debe ser líquida pero tampoco una masa. Introducimos el pollo troceado en el marinado, mezclamos bien, lo tapamos con un papel film, y a la nevera entre 1-2 horas, cuanto mas lo dejéis mas sabor cogerá, uno de los días que la hice para gente que no le gusta mucho el picante lo dejé para reposar solo 1h y 1/2, aunque la idea es dejarlo enfriar y reposar las 2 h para que impregne bien el sabor.
Durante ese tiempo aprovecharemos para preparar los cereales, machacándolos en varias tandas en un mortero, no debe quedar en polvo es solo romperlo un poco. Cuando lo tengáis todo machacado, lo ponéis en un bol o tupper profundo (donde haremos el empanado) y lo mezcláis con las especias que os indico en los ingredientes.
Cuando pase el tiempo de maceración, sacamos el pollo marinado de la nevera y procedemos a empanarlo. Sacamos trozo a trozo con ayuda de un tenedor porque si no os ponéis perdidos, y los vamos pasando por la mezcla de cereales y especias, como cualquier otro empanado normal, pero sin huevo. Aplastadlo un poco con las manos para que os quede bien pegadito. Ya veréis qué bien os quedan.
Y por fin el último paso será poner una sartén con aceite, y cuando esté caliente, ponemos fuego medio (no la hagáis a fuego rápido que se quema por fuera y no se os hace el pollo). Empezamos a meter nuestro maravilloso pollo crujiente estilo Kentucky uno a uno en el aceite y vamos dándole vueltas hasta que tenga el dorado que queráis. Cuando lo vayáis retirando, ponedlo en un plato con papel de cocina para escurrirle el aceite sobrante.
Os dejo una idea opcional que probé solo para vosotros, para todos aquellos que necesiten reducir la grasa en las comidas, en vez de freírlo, podéis hacerlo al horno precalentado y a unos 180º C para que se haga bien por dentro. Aunque queda muy rico la verdad es que queda un poco menos crujiente y un poco más seco, pero la opción la tenéis y no queda mal, de hecho solo se nota la diferencia si lo probaste frito primero.
De cualquiera de las dos maneras, obtendréis un pollo crujiente estilo Kentucky que dejará a todos, y en especial a los niños, boquiabiertos.
aprecio mucho la receta esta!me encanta esta comida